Siempre al volante. Siempre intentando disfrutar de cada coche que he probado. Llevo muchos años trabajando en la prensa del motor y sigo disfrutando como el primer día, sin perder la ilusión. Escucha mi podcast y lo verás... o lo oirás.

Seat 131 vs Renault 18: Comparativa de coches clásicos

August 11, 2024 24:30 23.53 MB Downloads: 0
¡Me encantan las comparativas de coches clásicos! No, no es cuestión de nostalgia… o no solo. Es que me encanta ver como coches que rivalizaban por los mismos compradores eran tan distintos entre sí. Estos grandes rivales de la España de los 70 y 80 eran muy diferentes… y los más vendidos, con diferencia, de su categoría. Tenían una cosa en común: Una gama muy amplia. Además de su amplia gama, tenían más cosas en común, como ser la evolución mejorada de los coches que les precedieron. Porque el R18 no era más que un R12 mejorado y más grande mientras que en el caso del Seat 131 no era más que un 124 más grande y puesto al día… pero manteniendo la tracción posterior y eje trasero rígido que ya, en esas fechas, eran una solución algo obsoleta. Primero veamos el “hilo” temporal. El Seat se comienza a vender en España en 1975, solo un año después de comenzar su venta en Italia el Fiat 131. La vida del Seat 131 seria larga, de nueve años, hasta 1984 cuando es sustituido por el Seat Málaga o, como leí en algún diario, el Seat Ronda “con culo”. El R18 apareció en España en 1978, solo meses después que en Francia. Su vida también fue de 9 años… en Europa. Porque en Argentina este modelo se mantuvo en producción y con notable éxito hasta 1993. Su sucesor, el R21 al contrario que lo sucedido con el Seat, se situaba incluso más por arriba del propio R18 y tuvo en enorme y merecido éxito… El Seat 131 fue la culminación de Fiat en cuanto a modelos con propulsión posterior. El 131 estaba más lejos del 124 que el R18 del R12. Porque sí, era una mejora del Seat 124, con una carrocería más grande, moderna, bonita, espaciosa y aerodinámica. Los R18 españoles y franceses eran los mismos. No exactamente porque con muy buen criterio no solo la definición de equipamiento, sino los reglajes de suspensión e incluso los desarrollos de los Renault fabricados es España se adaptaban a las peculiaridades de nuestras vías, con muchos menos kilómetros de autopistas y mayores pendientes. Pero en el caso de Seat la diferencia de los coches italianos y españoles era mayor y os explico los motivos, que son muy interesantes. Primero, porque se puede decir que en Italia el 131 rápidamente sustituye al 124, mientras que en España el éxito del modelo hace que convivan más años. En España no llegó nunca al Fiat 128, este sí de tracción delantera y que por tamaño, precio y segmento de mercado estaba más próximo al 1245 que el propio 131. El 131 fue diseñado en plena crisis del petróleo y se aprovechó para montar motores más modernos y económicos de consumo en cilindradas desde los 1,3 litros a los 1,6 que no llegaron a España, pues el 131 español utilizó los mismos motores que venía utilizando en sus Seat 124 y 1430 normales y especiales. El R18 nace en España con la versión GTS con un equipamiento tirando a generoso para le época y con motor de 1.647 cm3 y 79 CV, que luego fueron algunos más. En Francia había versiones más modestas, que como en el caso de Seat, se fabricaron en Valladolid, pero con la idea de ser destinadas a la exportación. En 1980 nacen las versiones Diesel con motor de 2.068 cm3 y 65 CV, que cuando llego el turbo un año después pasó a contar con 85 CV… un coche muy apreciado, pues disponía de las mismas o mejores prestaciones del original GTS de gasolina, pero con consumos mucho más ajustados. Y no me voy a olvidar del turbo, marca de la casa en esas fechas, con motor de 1.565 cm3 y 110 CV que, a partir de 1984, llegaron a los 125 CV. Los 131 españoles, como hemos dicho usaban motores propios. Con buen criterio el 1.124 cm3 de 65 CV se juzgó escaso para este coche cuya gama comenzaba con el 1.438 cm3 de 75 CV del Seat “catorce-treinta”. El siguiente motor era el 1.592 cm3 utilizado en los 124 más deportivos y en el Seat 132, con 95 CV. Y el motor estrella de los 131 más potentes, como el “Diplomatic” o el deportivo y precioso “CLX” era otro motor español, el de 1.919 cm3 y aa4 CV, una derivación del 1.995 cm3 de Fiat, pero reducido de cilindrada para acogerse a beneficios fiscales, por la fiscalidad en esos momentos “penalizaba la cilindrada”. Me gusta el Seat 131 pero si debo ser justo creo que el R18 fue mejor coche, al menos en España. ¿El motivo? Era un coche mucho más adaptado a la particulares condiciones del mercado español. Era muy cómodo en todo tipo de firmes, fácil de conducir y muy fiable. Si hablamos de versiones deportivas, ahí sí, creo que el 131 2.000 CLX era superior al R18 Turbo. Justo es reconocer que con la nueva suspensión de 1982 este modelo ganó en agilidad en curva, pero estaba lejos de eficacia deportiva del 131. Coche del día. Voy a elegir un Fiat 131… ¡pero el Abarth! ¡Que preciosidad! Un coche nacido, nada más y nada menos, que para sustituir al Lancia Stratos en los Rallyes… y que lo hizo con honor.