kaizen está hecho para curiosos compulsivos, un podcast sobre aprendizaje continuo en el que te acerco a ideas, técnicas y personas fascinantes que nos permiten entender el mundo cada día un poco mejor.
Similar Podcasts
En Crisis
Únete al club: https://splendid.clubXavi Robles y Pedro Ample, dos emprendedores creativos, charlan sobre el paso del tiempo y de la pereza que da reinventarse. Cada semana reflexionamos sobre los temas que se cruzan en nuestro día a día y entrevistamos a profesionales que nos dan consejos y claves para surfear los momentos de crisis.Apúntate a Splendid y consigue acceso a comunidades exclusivas, episodios sin anuncios y contenido extra de todos nuestros podcasts: https://splendid.club Hosted on Acast. See acast.com/privacy for more information.
Ты – это важно
Подкаст «Ты — это важно» поможет вам взращивать самые важные чувства внутри: чувство любви к себе, здоровой ответственности и бережного отношения.А также разобраться в психологических процессах, чтобы плыть по жизни легко, ловя попутный ветер.
Ведь каждый из вас — самый важный человек в своей жизни.
А с гостями подкаста мы будем показывать их пути в психотерапии, для того, чтобы снять стигму с этого вопроса и сделать заботу о ментальном здоровье нормой.
Ведущая — Мицкевич Елена, практикующий психолог и автор блога @elens_wayПо вопросам рекламы и сотрудничества:
ads.mitskevich@gmail.com
Cuida Tu Mente
Los expertos del Tec de Monterrey brindan herramientas y consejos para potenciar una vida positiva; con conciencia en el manejo y configuración de las emociones que nos permita conectar con las personas cercanas y con la comunidad. Un programa con ejercicios y rutinas para ayudarnos a cultivar una vida plena. Un podcast de Tec Sounds.
#202 ¿Vivimos en la era de la mediocridad?
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/202-vivimos-en-la-era-de-la-mediocridad/)A principios de los 90, dos artistas rusos llamados Vitaly Komar y Alexander Melamid tuvieron una idea bastante original. Decidieron que contratarían a empresas de investigación de mercados para averiguar cómo era el arte que más se valoraba en distintas partes del mundo. Y después las pintarían. Querían crear una serie de obras que reflejaran las diferencias culturales entre países tan diferentes como Rusia, China, Francia, Kenia o Estados Unidos. La titularían: «La elección del pueblo». Cada una sería diferente y única, un símbolo de la manera especial que tenían los habitantes de cada país de ver el mundo. Pero la cosa no salió como esperaban. En casi todos los países lo único que la gente quería era un paisaje con algunas figuras alrededor y animales en un segundo plano, con un fondo principalmente azul. Tras terminar aquel trabajo, Komar, uno de los autores, se lamentaba: «Viajamos por todo el mundo negociando con empresas de estudios de mercado, consiguiendo fondos para hacer las encuestas y acabamos recibiendo una y otra vez los mismos resultados. Pintando una y otra vez, los mismo fondos azules. Buscando la libertad encontramos la esclavitud»Sin embargo, esa fue precisamente la gracia de su obra. Nos gusta pensar que somos individuos únicos, pero nos parecemos, todos a todos, mucho más de lo que querríamos admitir. Es más: hay quien cree que hoy, 30 años después, vivimos en un tiempo en el que la originalidad ha muerto. En el cine, la moda, la arquitectura, la publicidad o la música todo se parece a todo y todo está dominado por las convenciones y los clichés. Bienvenidos a la era de la mediocridad. ¿O quizás no?Hace unos meses surgió un pequeño debate en el Programa de desarrollo directivo y liderazgo del Instituto Tramontana. Hablábamos de marketing y yo contaba cómo desde la llegada de Internet se había producido un efecto interesante: se había desbloqueado un mercado que hasta entonces era casi imposible de atender. Lo que en inglés llaman el “long-tail” o la cola larga; es decir, toda esa demanda de productos, servicios o contenidos súper específicas que nadie antes podía abastecer. Piensa en música rara, en espadas decorativas o en, no sé, podcasts sobre cualquier frikada posible. Vamos, esos mercados que antes eran nichos que no era rentable servir porque estaban dispersos por todo el mundo y ahora, de pronto, sí podemos conectar. Y entonces Irene, una de las alumnas, me llevó la contraria. E hizo bien. Esa es la gracia de las clases, que todos aprendemos, yo el primero. Bueno, no me llevó la contraria exactamente. Pero sí dijo cómo parece que en lugar de en un mundo cada vez más variado, vivimos en uno cada vez más uniforme. Y nos compartió un artículo realmente interesante de un tipo llamado Alex Murrell sobre el tema en el que cuenta precisamente esa misma historia sobre aquellos artistas rusos con la que hemos empezado. Y yo, que tiendo a ser obsesivo cuando no encuentro respuestas, llevo dándole vueltas a este debate desde aquella clase. Y ya va siendo hora de llegar a alguna conclusión. PATROCINADOR DEL CAPÍTULO: Triple Magnesio de BeLevels (descuento con el código KAIZEN) ¡Ya están abiertas las inscripciones para la 2ª edición del programa de desarrollo directivo y liderazgo que dirijo en Tramontana! ¿Te interesa? Toda la info aquí: https://www.tramontana.net/desarrollo-directivo-liderazgo¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#201 Descentralización (III): Las guerras Cripto — antes de Bitcoin
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/201-descentralizacion-iii-la-guerras-cripto-antes-de-bitcoin/)«Gobiernos del Mundo Industrial, cansados gigantes de carne y acero, vengo del Ciberespacio, el nuevo hogar de la Mente. En nombre del futuro, os pido a vosotros del pasado que nos dejéis en paz. No sois bienvenidos entre nosotros. No tenéis soberanía alguna sobre el lugar donde nos reunimosNo hemos elegido ningún gobierno, ni es probable que lo hagamos, así que me dirijo a vosotros sin más autoridad que aquella con la que la libertad siempre habla. Declaro el espacio social global que estamos construyendo independiente por naturaleza de las tiranías que estáis buscando imponernos. No tenéis ningún derecho moral a gobernarnos, ni disponéis de métodos para forzarnos a cumplir vuestra ley que tengamos razón para temer.Los gobiernos derivan sus lícitos poderes del consentimiento de los que son gobernados. No habéis pedido ni recibido el nuestro. No os hemos invitado. No nos conocéis, ni conocéis nuestro mundo. El Ciberespacio no se halla dentro de vuestras fronteras. No penséis que podéis construirlo, como si fuera una obra pública. No podéis. Es un acto natural que crece de nuestras acciones colectivas.No os habéis unido a nuestras reuniones, ni creasteis la riqueza de nuestros mercados. No conocéis nuestra cultura, nuestra ética, o los códigos no escritos que ya proporcionan a nuestra sociedad más orden que el que podría obtenerse por cualquiera de vuestras imposiciones.Proclamáis que hay problemas entre nosotros que vosotros necesitáis resolver. Usáis esto como una excusa para invadir nuestros límites. Muchos de estos problemas no existen. Donde haya auténticos conflictos, donde haya errores, los identificaremos y resolveremos por nuestros propios medios. Estamos creando nuestro propio Contrato Social. Esta autoridad se creará según las condiciones de nuestro mundo, no del vuestro. Nuestro mundo es diferente.»Así empezaba un texto mítico de la contracultura digital de los años 90: la declaración de independencia del ciberespacio, escrita por John Perry Barlow en 1996. Si escuchaste el capítulo que dediqué a la cultura hacker recordarás que muchos de sus valores me parecía que eran especialmente relevantes en el mundo que tenemos hoy y, sobre todo, en el que tendremos mañana. También te decía que, ahora que con todo el movimiento crypto se habla tanto de descentralización, yo veía en esas conversaciones mucho del idealismo de aquella cultura hacker de los 80 y 90. Y no es casualidad. En el origen de mucho de todo esto estaban, claro está, hackers. Precisamente investigando esos orígenes, y uniendo las piezas de mi propia memoria, me encontré con una historia que creo que es digna de ser contada. No ya por lo interesante que pueda parecerme, sino por el debate que encierra sobre nuestros derechos como ciudadanos. Y a esa historia y a ese debate, vamos a dedicar el capítulo de hoy. ¡Ya están abiertas las inscripciones para la 2ª edición del programa de desarrollo directivo y liderazgo que dirijo en Tramontana! ¿Te interesa? Toda la info aquí: https://www.tramontana.net/desarrollo-directivo-liderazgo¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#200 No todos los que vagan están perdidos: Diez aprendizajes para tratar de vivir con autenticidad
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/200-no-todos-los-que-vagan-estan-perdidos/)«Me detengo en la orilla del mar, solo, y comienzo a pensar… ahí están las olas embravecidas… montañas de moléculas, cada una ocupándose estúpidamente solo de sus propios asuntos… trillones de fragmentos… formando al unísono un oleaje blanco.Durante eras y eras… antes de que los ojos las pudieran ver…año tras año…batiendo atronadoramente la orilla como ahora. ¿Para quién? ¿Para qué? En un planeta muerto sin vida a la que entretener.Nunca en reposo… azotadas por la energía… derrochada prodigiosamente por el Sol… vertida en el espacio. Una gota hace rugir el mar.En la profundidad del océano todas las moléculas repiten los patrones hasta que se forman otras nuevas más complejas. Creando otras a su semejanza… y comienza un nuevo baile.Crecen en tamaño y complejidad… seres vivos, masas de átomos, ADN, proteínas…danzando en un patrón cada vez más intrincado.Fuera de la cuna, en tierra firme… aquí están de pie… átomos con conciencia… materia con curiosidad…Detenidos frente al mar… se maravillan ante el asombro… Yo… un universo de átomos… un átomo en el universo.»Esta especie de poema de Richard Feynman me ha parecido la forma más apropiada de comenzar hoy, que llegamos al capítulo 200 de Kaizen, que se dice pronto. Siendo sincero, en realidad van bastantes más, porque hay muchos que no he enumerado, al considerarlos bonus o capítulos especiales. Pero oficialmente éste es el 200. Y lógicamente va a ser algo distinto a los habituales. O no tanto, porque es cierto que de vez en cuando me da por hacer capítulos más reflexivos, generalmente, coincidiendo con números redondos, como este o con finales de temporada, y a esta le queda poco. Así que todo encaja.En resumen, hoy vamos a hablar un poco de lo que decía Feynman en su texto: cómo nosotros, seres con consciencia, materia con curiosidad, vagamos por la vida tratando de darle sentido. Patrocinador del capítulo: OmnidataMarketing ¡Ya están abiertas las inscripciones para la 2ª edición del programa de desarrollo directivo y liderazgo que dirijo en Tramontana! ¿Te interesa? Toda la info aquí: https://www.tramontana.net/desarrollo-directivo-liderazgo¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
Q&A11: Encuentros inesperados, organizar nuestra información, diseño humano, cambios de sector, estoicismo, objetivos y un intríngulis
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/qa11-encuentros-inesperados-organizar-nuestra-informacion-diseno-humano-cambios-de-sector-estoicismo-objetivos-y-un-intringulis/)¡Último Preguntas y respuestas de la temporada! Y ha quedado bastante bastante variado.Se nos han cruzado fortuitos, Sistemas de organización de nuestra información, diseño humano, cambios de sector, estoicismo, formas de organizar nuestros objetivos y hasta una pregunta hipotética sobre cómo vivir miles de vidas. Por cierto, que me habéis avisado varias personas de que en algunos de los anteriores, las preguntas de la audiencia sólo sonaban por un canal y no en estéreo. Perdonad, fue un fallo técnico al exportarlas desde whatsapp, pero espero que haya quedado resuelto.Con este capítulo creo que me he puesto casi al día, me parece que queda algún audio suelto, pero esos ya serán para la próxima temporada.Patrocinador del capítulo: Morfeo.com (150€ de descuento con el código KAIZEN) ¡Ya están abiertas las inscripciones para la 2ª edición del programa de desarrollo directivo y liderazgo que dirijo en Tramontana! ¿Te interesa? Toda la info aquí: https://www.tramontana.net/desarrollo-directivo-liderazgo¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#199 Conversaciones difíciles
(NOTAS COMPLETAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/199-conversaciones-dificiles) Hay cuatro palabras ante las que hasta la persona más valiente tiembla: «Cariño, tenemos que hablar»Aunque en realidad, para quien las pronuncia tampoco suele ser sencillo. Es más, habitualmente van precedidas de días de darle vueltas a lo que sea de lo que se quiere hablar. A los argumentos que se usarán, a las reacciones de la otra persona o a las posibles consecuencias que esa conversación tenga. Y todo esto es antes de que suceda. Durante la conversación, la mitad de las veces acabamos por no decir lo que queríamos decir. Y casi la otra mitad, por decirlo mal o porque la conversación descarrile y acabemos discutiendo sobre nosequé cosa que sucedió hace nosecuántos meses sin saber muy bien cómo hemos terminado allí. Esto, además, no sucede sólo en nuestra vida personal. Ocurre constantemente en el ámbito profesional. Nos suele costar mucho abordar cualquier tipo de conversación incómoda o difícil sobre nuestro trabajo, nuestro salario, dar nuestra opinión a otras personas…Sin embargo, las conversaciones difíciles son una parte esencial de nuestras interacciones con otros. A veces, nos maravillamos ante quienes tienen la capacidad de afrontarlas con empatía y asertividad, quienes son capaces de decir lo que necesitan decir, sin que la cosa descarrile y, mejor aún, sin hacer que la otra persona se sienta atacada. ¿Qué hacen diferente esas personas? ¿Podemos aprender de ellas? Pues espero que sí, porque vamos a dedicar el capítulo de hoy, precisamente, a las conversaciones difíciles. Patrocinador del capítulo: Crea Energía ¡Ya están abiertas las inscripciones para la 2ª edición del programa de desarrollo directivo y liderazgo que dirijo en Tramontana! ¿Te interesa? Toda la info aquí: https://www.tramontana.net/desarrollo-directivo-liderazgo¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#198 Metacognición (I): La ilusión de conocimiento - dragones, cremalleras y bicicletas
(NOTAS Y ENLACES COMPLETOS AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/198-metacognicion-i-la-ilusion-de-conocimiento-dragones-cremalleras-y-biciceltas/)Empecemos hoy con un experimento. Te voy a hacer algunas preguntas y te sugiero que si es necesario pauses el podcast para responderlas en tu cabeza. ¿empezamos?Primera pregunta: de uno a siete, ¿cuánto dirías que comprendes cómo funciona una cremallera? Te doy unos segundos para pensarlo¿Lo tienes? Genial. Vamos por la segunda, y esta requiere más tiempo: ¿Cómo funciona una cremallera? Intenta describir lo más detalladamente posible todos los pasos que suceden cuando cierras o abres una. Lo ideal sería que lo pusieras por escrito, pero como imagino que estás haciendo otras cosas mientras escuchas el podcast, al menos, intenta describirlo de palabra, en tu cabeza o en alto, como prefieras, pero lo mejor que puedas. De nuevo te voy a dar unos segundos, pero si es necesario pausa el podcast.¿Has vuelto ya? Vale. Última pregunta, que es la misma que la primera: Ahora, en la misma escala que antes, de uno a 7, ¿cuánto dirías que conoces el funcionamiento de una cremallera?Por lo general, tendemos a rebajar nuestra nota después de hacer el ejercicio de intentar describir cómo funciona algo y darnos cuenta de que no lo tenemos tan claro como creíamos. Resulta que los humanos vivimos continuamente en una ilusión. Una a la que vamos a dedicar el capítulo de hoy: la ilusión de conocimiento. Y por el camino, me temo, que nos van a salir unas cuantas preguntas raras. ¡Ya están abiertas las inscripciones para la 2ª edición del programa de desarrollo directivo y liderazgo que dirijo en Tramontana! ¿Te interesa? Toda la info aquí: https://www.tramontana.net/desarrollo-directivo-liderazgo¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#197 Creatividad (VIII) - Espera lo inesperado (y III): Monty Python, paradojas y brebajes extraños
(NOTAS COMPLETAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/197-creatividad-viii-espera-lo-inesperado-y-iii-monty-python-paradojas-y-brebajes-extranos/)«Graham Chapman, coautor del sketch “el loro muerto” ya no existe. Ha dejado de ser, ha pasado a mejor vida, descanse en paz. Ha palmado, se ha ido al más allá, ha mordido el polvo, la ha diñado, ha exhalado su último aliento y ha ido a encontrarse con el gran jefe del entretenimiento ligero del cielo. Y creo que todos pensamos lo triste que es que un hombre de tan talento, de tal capacidad y amabilidad, de tal inusual inteligencia se haya desvanecido así de repente a la edad de sólo 48 años, antes de que pudiese alcanzar muchas de las cosas de las que era capaz y antes de que se hubiese divertido lo suficiente. Bueno, a eso creo que debería decir: «tonterías». ¡Que tenga un buen viaje, el cabrón aprovechado ése! Y la razón por la que pienso que debería decir esto es que él nunca me perdonaría si no lo hiciese, si desperdiciara esta gloriosa oportunidad de tomaros el pelo en su honor. Él tenía de todo excepto «buen gusto, imbécil». Pude oírle susurrarme al oído anoche, mientras escribía estas palabras. Decía: «Muy bien, Cleese, estás muy orgulloso de ser la primera persona en haber dicho “mierda” en la televisión británica. Si este funeral es realmente para mí, para empezar quiero que seas la primera persona, en un funeral británico, en decir “joder”»Así despedía un mítico Humorista inglés, John Cleese, a uno de tus compañeros en los Monty Python. Cleese es, además, el protagonista de uno de los tres cuadros que hay en el despacho en el que grabo el podcast. Bueno, más bien su silueta, en un homenaje a uno de sus sketches más conocidos. Como ya hemos dicho muchas veces, detrás del mejor humor se esconde habitualmente un enorme ejercicio de creatividad. La que se necesita para inventar situaciones absurdas o sorprendentes capaces de hacernos cosquillas en el cerebro.Hace ahora la friolera de 50 años, Cleese fundó una empresa, Videoarts, para dar formación en otras empresas usando, claro, el humor. Haciendo un poco de arqueología en Youtube es relativamente sencillo encontrar algunas de sus charlas. En concreto hay una que está muy bien sobre creatividad. «Hay algo negativo que os puedo decir sobre la creatividad. Y es que es más sencillo decir lo que la creatividad no es. Un poco como aquel escultor que, al ser preguntado cómo había esculpido un maravilloso elefante, explicó que había tomado un gran bloque de mármol y después había ido quitando todas aquellas partes que no se parecían a un elefante. Y aquí viene la parte negativa: la creatividad no es un talento. No es un talento. Es una forma de operar»Es decir, según él, la creatividad es una forma de hacer las cosas. Volveremos a sus ideas en algún capítulo futuro, seguro, aunque si no aguantas hasta entonces te he dejado un enlace a una de sus charlas en las notas. Pero hoy vamos a seguir profundizando en esa forma de hacer las cosas vista desde otra perspectiva, la de un filósofo griego que odiaba a la humanidad. Y es que vamos a tratar de terminar con esas ideas que hemos ido rescatando de un libro extraño llamado «Espera lo inesperado», en el que Roger von Oech trataba de sacar aprendizajes sobre creatividad de un tal Heráclito. Un plan sin fisuras. ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#196 Visualización: paracaidistas sin paracaídas, ahorrar para la jubilación y maratones
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/196-visualizacion-paracaidistas-sin-paracaidas-ahorrar-para-la-jubilacion-y-maratones/)Imagina asomarte desde un avión, al vacío, a 25,000 pies de altitud. Claro, que si eres como yo, no tendrás ni idea de cuánto son 25,000 pies. Son 7620 metros. Es decir, más de 7 km y medio. A esa altitud, los paracaidistas a menudo necesitan usar bombonas de oxígeno. O eso he leído, por lo que sea no lo he comprobado. Ahora que tenemos una idea más o menos clara volvamos al avión. Te decía que imaginaras asomarte. El suelo se ve muy lejos, todo parece muy pequeño y el aire, helador, retumba en tus oídos. Imagina ahora que te dejas caer. E imagina que lo haces sin paracaídas.He echado unos números rápidos y tendrías por delante poco más de dos minutos antes de llegar al suelo.Imagina, y esto te será más fácil de imaginar, que, por lo que sea, tu objetivo no es acabar decorando el suelo con tus entrañas. No. Si te has dejado caer, ha sido con la intención de aterrizar en una red especial, de 30 metros por 30 metros de lado, que te espera allá abajo. Y, de paso, batir el récord del mundo de salto sin paracaídas. Eso hizo Luke Aikins en 2016. 30 metros por 30 metros es una superficie aparentemente grande: son 900 metros cuadrados. Claro, que a 7 kilómetros y medio de distancia, aquello es como enhebrar una aguja. Aikins cuenta cómo, a medida que descendía, podía ver las montañas a su lado, los ríos serpenteando en el suelo… pero que él sólo buscaba una cosa: luces blancas. De hecho, antes de saltar, un amigo le dio un breve consejo en inglés: White, you are alright; red, you are dead. Blanco, Todo bien. Rojo estás muerto. Y es que, para facilitar un poco esta locura, en tierra pusieron luces como las que utilizan las pistas de aterrizaje de los aviones. En rojo la zona alrededor de la red. Vamos, donde más vale no caer. Y en blanco brilla la zona interior de la red. Ese es el objetivo.Cuenta Akins que eso fue en lo único en lo que se enfocó. Que, de hecho, esa fue la clave, ese foco concentrado en algo tan pequeño es lo que le permitió hacer ese salto, hacer lo que parece imposible para cualquier persona, saltar de un avión sin paracaídas y no sólo encontrar, sino enhebrar, una aguja en un pajar. Patrocinador del capítulo: Morfeo.com ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#195 El poder de las herejías
(NOTAS COMPLETAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/195-el-poder-de-las-herejias/)«La verdad se busca por sí misma; y al buscar aquello que se busca por sí mismo, uno solo está preocupado por encontrarlo... El buscador de la verdad no es quien estudia los escritos de los antiguos y confía en ellos, sino más bien quien duda de su fe en ellos y cuestiona lo que recogen, quien se somete al argumento y la demostración, y no a los dichos de un ser humano cuya naturaleza está llena de todo tipo de imperfección y deficiencia. [...] Si aprender la verdad es su objetivo, es su deber hacerse enemigo de todo lo que lee, y [...] atacarlo desde todos los lados. También debe sospechar de sí mismo [...] para [...] evitar caer en cualquier prejuicio o indulgencia. Si sigue este camino, se le revelarán las verdades [...]»Algo parecido a esta defensa del pensamiento crítico dejó escrito el primer personaje de los muchos que vamos a mencionar hoy. Digo parecido, porque lo hizo en árabe antiguo y esto es una traducción más que modernizada. Su autor fue Hasan Ibn-al-Haytham, más conocido en Occidente como Alhazen y considerado por muchos como el primer científico. Y nació en el año 965, en un mundo en el que no existían los relojes, ni los telescopios, ni los microscopios, ni casi nada de lo que hoy nos es normal. Comenzó estudiando la religión, pero pronto acabó desencantado con sus dogmas incuestionables y con la manera en la que volvía a unas personas contra otras. Así que decidió volcarse en la búsqueda de la verdad objetiva, pura e imparcial. Se dedicó a estudiar a fondo la realidad.Y así, 8 siglos antes de que se inventara la fotografía, Alhazen fue el primero en dar una explicación completa a un fenómeno que se conocía desde tiempos de la antigua Grecia: cómo, en una sala oscura con una única apertura en uno de sus muros, al colarse los rayos de luz por ella, se proyectaba en la pared opuesta la imagen del exterior, invertida tanto horizontal como verticalmente. Es lo que siglos más tarde, Kepler llamaría cámara oscura. La palabra «cámara», de hecho, viene del árabe y de los textos de Alhazen, que influyeron a gente como Leonardo da Vinci, Descartes o el propio Kepler. Y es que en sus libros sobre óptica fue capaz de desmontar las teorías griegas sobre el funcionamiento de la luz, que aún en su época se consideraban correctas, y de describir, a través de sus experimentos, la anatomía y el funcionamiento de nuestros ojos, como un sistema óptico. Para escribir esos libros, eso sí, Alhazen tuvo que recurrir a medidas extremas. Tras despertar la ira del califa de turno, tuvo que hacerse el loco, literalmente. Sólo recluyéndose en su casa durante años pudo dedicarse a descifrar la realidad. Y es que, Alhazen, como muchas de las personas que cambiaron el mundo, fue considerado un hereje.Y hoy vamos a celebrar la herejía, porque se me han juntado distintas lecturas que he ido acumulando en los últimos meses con una idea que tengo a medio cocinar sobre la necesidad que tenemos de poner a prueba mucho de lo que damos por sentado en nuestra sociedad, en nuestras empresas… y en nuestra vida en general. Eso sí, no sé muy bien qué va a salir de aquí, ya te lo digo. Patrocinador del capítulo: PortobelloStreet.es ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
Q&A10 - Neurodiversidad, retail jail, humanocracia, Shackleton, expertos, consciencia, sextos sentidos y libre albedrío
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/qa10-autismo-retail-jail-humanocracia-expertos-consciencia-y-libre-albedrio/)¡Nuevo preguntas y respuestas! Y el de hoy muy variado en cuanto a los temas: hablamos de nuestros sentidos, de formas de organización empresarial, de algunas ideas sobre cómo cambiar de rumbo profesional, de Shackleton, de la consciencia, cómo no, y de otros muchos temas. Eso sí, las preguntas son cada vez más variadas, pero no más fáciles 🙃 ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#194 Creatividad (VII) - Espera lo inesperado (II): Peces cabreados, Furias asesinas y las primeras bicicletas
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/194-creatividad-vii-espera-lo-inesperado-ii-peces-cabreados-furias-asesinas-y-las-primeras-bicicletas/)Hace 60 años, una joven psicóloga llamada Bernice Eiduson comenzó un largo proyecto de investigación sobre la personalidad y los hábitos de trabajo de 40 científicos destacados. Entre los sujetos del experimento había cuatro ganadores del premio Nobel, incluido Linus Pauling que lo ganó dos veces, y un clásico de este podcast: Richard Feynman, cómo no. La investigación duró décadas. De hecho siguió tras la muerte de Eiduson. Y una de las preguntas que trataron de responder fue: «¿Cómo es posible que algunos científicos puedan producir trabajo de alto nivel a lo largo de toda su vida?» ¿Qué tienen de especial? ¿Es su personalidad? ¿Son sus habilidades? ¿Sus rutinas? El patrón que encontraron era claro, aunque sorprendente para algunas personas. Los mejores científicos cambiaban constantemente de tema. Durante sus primeros 100 artículos de investigación, el tema cambiaba una y otra vez. Y no es que cambiaran 3, 5 o 10 veces. De media, los científicos que eran más creativos, durante más tiempo, cambiaron el tema de investigación en sus primeros 100 artículos 43 veces. Y el proyecto de Eiduson no ha sido el único en encontrar resultados similares. Distintos investigadores en diferente campos han llegado a conclusiones similares: las personas más creativas tienen varios proyectos diferentes a la vez. Así empieza una charla TED en la que Tim Harford, un escritor y autor de un podcast muy recomendable del que ya te he hablado alguna vez —Cautionary Tales— habla de creatividad. Y su conclusión es que lo que él llama la multitarea a cámara lenta, es decir, cambiar de tema con frecuencia es algo omnipresente entre la gente creativa.Y dice que es algo que se entrena, que a fuerza de hacerlo, despierta la creatividad. Claro que habría terminado mucho antes si hubiera leído a un griego que hace 2.500 años decía cosas como que «los amantes del conocimiento deben abrir sus mentes a muchas cosas». Bueno, o como se dijera en griego, que cualquiera lo pronuncia. ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#193 Modelos mentales 21 - Estrategia: militares ocultistas, mantas que no tapan y un ruso que salvó el mundo
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/193-modelos-mentales-21-estrategia-militares-ocultistas-mantas-que-no-tapan-y-un-ruso-que-salvo-el-mundo/)Agosto de 1916. Cientos de miles de soldados sufren las penurias de la guerra en los más de 800 km de trincheras que se han dispuesto a lo largo de Francia y Bélgica, desde las montañas hasta el mar. Las alambradas y las ametralladoras hacen imposible que nadie avance. La caballería, considerada hasta hacía poco, la fuerza militar más desequilibrante había acabado siendo completamente inútil. Sin embargo, a pocos cientos de kilómetros detrás de las trincheras, civiles y militares franceses y británicos se reunieron para ver la demostración de un invento increíble. Era una mañana calurosa, con el cielo despejado. En la distancia, empezaron a oír el ruido de un motor mecánico, el sonido de piezas metálicas girando y clavándose en el suelo, como si de enormes orugas se tratara y vieron acercarse lentamente una máquina de 28 toneladas de metal. Estaban frente al primer tanque de la historia.Aquellas primeras máquinas eran torpes y poco fiables, pero podrían haber sido perfectamente la solución a aquellas interminables trincheras. Durante la Primera Guerra Mundial, sin embargo, apenas llegaron a usarse. Unos pocos convencidos de su utilidad trataron de persuadir a la cúpula militar de la necesidad de cambiar por completo la estructura del ejército y aprovechar esa nueva tecnología. Un tipo extremadamente inteligente pero al parecer muy peculiar, amante entre otras cosas del ocultismo, el General J.F.C Fuller, llegó incluso a diseñar una estrategia completa con la que sorprender a los alemanes y destruir sus centros neurálgicos en unas pocas horas, con los tanques atravesando sus trincheras sin detenerse. Sin embargo, la guerra terminó antes de que ese plan se pusiera en marcha. Pasaron los años, Alemania se rehizo y acabó bajo el mando de Hitler. Y al estallar la guerra conquistó media Europa a una velocidad de vértigo, usando tanques, con una idea muy similar a la Fuller: la Blitzkrieg o guerra relámpago.Pero lo curioso no es eso. Lo curioso es que mientras crecían los rumores de que Alemania estaba reconstruyendo su ejército en secreto, ¿sabes a qué se dedicó el ejército británico durante todos esos años? Pues, para empezar, a prohibir los libros de Fuller. Sus ideas eran consideradas radicales y él, poco menos que insoportable. Que tratara a todo el mundo como si fuera imbécil, seguramente no ayudó.Lo otro que hizo el ejército fue volver a las buenas costumbres. Se dedicaron a pulir sus cascos, encerar sus botas y cuidar de sus caballos. Y cuando tuvieron que responder a la amenaza de la militarización nazi, multiplicaron por 10 el gasto en heno y otros alimentos para caballos. A los oficiales de caballería les dieron un segundo caballo. A los oficiales de tanques, les dieron otro caballo más. Maravilloso. ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#192 Pepe García («El estoico»): paternidad, los límites del estoicismo y rutinas imposibles
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/192-pepe-garcia-el-estoico-paternidad-los-limites-del-estoicismo-y-rutinas-imposibles/)«No dejes que el dulce sueño se apodere de tus lánguidos ojos sin antes haber repasado lo que has hecho en el día: “¿En qué he fallado? ¿Qué he hecho? ¿Qué deber he dejado de cumplir?”. Empieza desde el comienzo, recórrelo todo, y reprochar los errores y alégrate de los aciertos» — PitágorasEsta cita de Pitágoras la descubrí en el libro de mi invitado de hoy y creo que no puede definirle mejor. Pepe García, al que muchos conoceréis como El Estoico, lleva años sumergiéndose en las profundidades del estoicismo y reflexionando, para después divulgar. Lo hace a través de su podcast, que se llama El Estoico —claro—, y de sus libros. El primero fue Siempre en pie, y lleva nosecuantas ediciones ya, y el segundo saldrá en breve y se va a llamar Manual para la serenidad, algo que seguro que nos viene bien a muchos.Juntos hablamos de estoicismo, lógicamente, pero tratamos de salirnos de las preguntas más habituales y nos fuimos a otras filosofías, a cuándo todas estas enseñanzas ancestrales dejan de ser funcionales, a la paternidad y a otro montón de cosas. Y lo hicimos, además, en mi querido Instituto Tramontana, grabándolo en directo delante de unas 50 personas. Y lo pasamos de maravilla.Este año me ha dado por grabar algunas entrevistas con público y la verdad es que cada día lo disfruto más, así que si te apetece venir a la próxima, que sepas que habrá más ocasiones. Tanto con kaizen como con Nada Que Ganar.Pero, bueno, no me enrollo más: espero que disfrutes tanto como lo hice yo de esta conversación con Pepe García ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#191 Del largo ahora al último ser humano
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/191-del-largo-ahora-al-ultimo-ser-humano)Es posible que hayas escuchado alguna vez el discurso de inauguración de Steve Jobs en Stanford. Es uno de esos vídeos con los que uno se topa de vez en cuando en internet. Mucha gente recuerda y cita frases que pronunció ese día. Como aquello de que los puntos sólo se unen mirando hacia atrás, o lo de que conviene preguntarse si lo que vas a hacer hoy es lo que querrías hacer si fuese el último día de tu vida. O como las palabras con las que cerró aquel discurso, por las que mucha gente recuerda a Steve Jobs: “Stay Hungry. Stay Foolish.” Algo así como «Mantente hambriento. Mantente alocado», pero suena mucho mejor en inglés. Aunque de lo que no solemos acordarnos es de que esas palabras no son suyas. Lo dice él mismo justo antes de esa frase, cuando cuenta que las leyó a mediados de los años 70, en la última página del último número de una revista bastante peculiar: The Whole Earth Catalog. El Catálogo de la Tierra Completa. Esas palabras, “Stay Hungry. Stay Foolish”, fueron la manera en la que tuvieron de despedirse de sus lectores.Aquella revista fue fundada en los años 60 por un tipo peculiar: Stewart Brand. Y la historia detrás de esas palabras resume a la perfección su filosofía. En 1966, Brand creó una campaña para exigir a la NASA que compartieran con el mundo las fotos que tenían de la Tierra vista desde el espacio. Sí, porque en 1966, la mayor parte de la gente no había visto una foto de la Tierra. Así que nuestro amigo decidió distribuir chapas con una frase: «¿Por qué no hemos visto una foto de la Tierra al completo?» Estaba convencido de que la imagen de aquella canica azul de la que hablamos hace unos cuantos capítulos podía cambiar el mundo. De ahí vino el nombre de la revista. Brand era una de tantas personas obsesionadas con el efecto perspectiva del que te he hablado varias veces. De hecho, tenía una especie de proyecto en el que quería contraponer las imágenes de cómo se veía el amanecer de la Tierra desde el espacio como cómo se vivía siendo un humano en la Tierra. Y en sus propias palabras, se «imaginaba un autoestopista al amanecer, en una carretera perdida, con el sol saliendo y trenes pasando a su lado. La mentalidad de un joven autoestopista es una de las mentalidades más libres que hay». Y remataba, diciendo “You are always a little bit hungry and you know you are being completely foolish” «Siempre tienes un poco de hambre y sabes que estás siendo completamente alocado»Te he dicho que Brand es un tipo peculiar, pero seguramente no tanto como nos lo parece hoy. Como todos, fue un producto de su tiempo. Alguien que nació en 1938 y que pasó los primeros 30 años de su vida en una época de progresos tecnológicos increíbles. Progresos que nos permitirían ser dueños de nuestras vidas. De hecho, si en lugar de irnos a la última página, del último ejemplar del Whole Earth Catalog, nos vamos a la primera página de su primer ejemplar, publicado en 1968 con una imagen completa de la Tierra en su portada y leemos el pequeño manifiesto con el que se presenta, nos encontramos con la siguiente declaración, que es bastante difícil de traducir, pero vamos a intentarlo: «Propósito:Somos como los dioses y ya puestos podríamos aprender a hacerlo bien. Hasta ahora, el poder y la gloria que remotamente hemos alcanzado —a través de gobiernos, grandes empresas, la educación formal, la iglesia— han sido exitosos sólo hasta el punto en el que sus groseros defectos oscurecen los auténticos avances. En respuesta a este dilema y a esos avances, se está desarrollando todo un campo de poder personal —el poder de los individuos para dirigir su propia educación, encontrar su propia inspiración, dar forma a su entorno y compartir su aventura con quien quiera estar interesado. El Catálogo de la Tierra Completa busca y promueve herramientas para ayudarte en ese proceso»¡Toma ya! ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/
#190 Guerreros de la roca
(NOTAS Y ENLACES DEL CAPÍTULO AQUÍ: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/kaizen/190-guerreros-de-la-roca/)«La mentalidad de una persona común contiene un porcentaje enorme de inconsciencia. Somos prisioneros de la costumbre y ni siquiera lo sabemos. Una persona corriente tiene aproximadamente sesentamil pensamientos diarios, y la mayoría de ellos son los mismos todos los días. La tarea del guerrero es liberar la mente consciente de estos pensamientos repetidos, para así dirigir la atención de forma deliberada y responder de manera espontánea y no habitual a situaciones de riesgo. La plena atención y la espontaneidad son las claves para obtener poder, y el primer paso para mejorar estas cualidades es alumbrar la penumbra del reino de nuestro inconsciente» — Arno Ilgner¡Toma ya! Unos cuantos capítulos atrás te hablé del miedo a través de los aprendizajes de Alex Honnold, un escalador al que cariñosamente llamé hombre-cabra, un poco por la combinación entre su capacidad para trepar y las cosas que se le ocurría hacer. El ser y el estar a veces se diferencian poco. Hace más tiempo aún, en el capítulo 154, te hablé de nuestro diálogo interior. Es decir, de cómo según nos hablemos a nosotros mismos, cambia nuestra manera de ver el mundo y nuestro rendimiento. Y en ambos capítulos mencioné de pasada un libro, el mismo del que te he leído un párrafo al principio: The Rock Warriors Way, que en España se llamó, Guerreros de la Roca, de Arno Ilgner. Que, por cierto, la edición que tengo yo en castellano, que te dejo enlazada en las notas, está repleta de fotos alucinantes de escalada. Y por si no te había quedado claro con el párrafo que te he leído antes, te diré que es un libro bastante peculiar. Se publicó por primera vez en 2003, pero el lenguaje que usa a mí me suena a veces a ese batiburrillo de ideas pseudocientíficas y esotéricas que fue la cultura New Age de los 70. O al menos eso creo, porque yo no la viví. En cualquier caso, a lo que iba es que el lenguaje que usa es extraño y puede generar algo de rechazo. A mí me lo generó al principio, desde luego. Y además, tampoco aconsejaría a nadie tomárselo muy al pie de la letra, no creo que tenga una base científica muy sólida. Pero, dicho todo esto, creo que es exactamente lo que promete ser: un manual de entrenamiento mental. Dirigido a escaladores, sí, pero con un montón de lecciones que nos pueden ser útiles a todos. O eso espero, porque es precisamente de lo que vamos a hablar en el capítulo de hoy. ¿Te gusta kaizen? Apoya el podcast uniéndote a la Comunidad y accede a contenidos y ventajas exclusivas: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/comunidad-kaizen/